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La poética del cuerpo en movimiento: un homenaje a Awilda Sterling Duprey que traza rutas hacia la liberación

  • Writer: afrodescendenciaup
    afrodescendenciaup
  • Sep 18
  • 4 min read

por Laren M. Calderón Franco
por Laren M. Calderón Franco

El pasado jueves, 11 de septiembre en el emblemático Teatro de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras, se llevó a cabo por todo lo alto Trazos, homenaje en vida a la extraordinaria, mítica e irrepetible artista multidisciplinaria afropuertorriqueña, Awilda Sterling Duprey. El evento fue organizado por Tiznando el país: Visualidades y representaciones, con la finalidad de una programación diseñada para celebrar las múltiples contribuciones de Sterling Duprey a la cultura puertorriqueña y al legado afrocaribeño que atraviesa su fascinante carrera artística. El evento también contó con las colaboraciones de BRAAVE, Editorial La Tachuela, El Terreno, Afro Lab del Centro PRAFRO, Humanidades Puerto Rico, Teatro público y Y no había luz, con el objetivo de trabajar en una documentación historiográfica, artística y literaria a la altura de la carrera de Sterling Duprey. 


El homenaje contó con la presencia de las Co-directoras de Tiznando el País: Visualidades y representaciones la Dra. María Elba Torres Muñoz y Marianne Ramírez Aponte, la rectora del Recinto, la Dra. Angélica Varela Llavona, la representante del PIP Nelie Lebrón Robles y con el orador invitado, el artista visual, Pepón Osorio; el cual no pudo contener las lágrimas al dedicarle sus palabras a quien ha sido una figura clave en su formación artística. De manera introductoria, se presentó una semblanza visual, investigación de archivo trabajada por le gestore y directore artística de Tiznando el País, Alejandra (Al) Rosa y el estudiante interno y videógrafo Roberto Bruno en colaboración con el Afro Lab del Centro PRAFRO. El video fusionó la imagen y la palabra en una hermosa gesta poética que, a pesar de su brevedad, abordó el tema de la corporalidad y sus sin fines de posibilidades desde la mirada multidisciplinaria que ha movido, mueve y seguirá moviendo a Sterling Duprey. 


por Laren M. Calderón Franco
por Laren M. Calderón Franco

Como parte del homenaje se presentó por todo lo alto el performance Las Juntas, pieza tributo a Awilda Sterling Duprey de la artista transdisciplinaria y gestora cultural, Awilda Rodríguez Lora, junto a un elenco maravilloso de jóvenes de bachillerato y egresadxs de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras y la Universidad del Sagrado Corazón. El performance es descrito en las notas de la directora como:


“la corporalidad de la liberación” movida por “una manada de cuerpes comprometides a la experimentación, la curiosidad física, espiritual y rítmica de lo que es sentir la emancipación a través de la improvisación, los movimientos gestuales y la presencia”. 


por Laren M. Calderón Franco


Casi como si de una experiencia catártica se tratase, el performance tenía como eje central el movimiento corporal como un acto de liberación ante las imposiciones a las cuales nos vemos sometidos constantemente como sujetos colonizados. Lleno de movimientos no convencionales y desafiantes, los cuerpos se desplazaban de un lado a otro en un panorama luminoso lleno de colores vibrantes y a veces tenues, con ritmos de percusión que invitaban a querer mover el cuerpo a la par del sandungueo del elenco. Partiendo de las palabras de Sterling Duprey, “No quiero hacer lo que no quiero”, se enaltece la importancia del deseo de retar a través de la materialidad y maleabilidad del cuerpo las estructuras represivas que encadenan nuestros cuerpos sometiéndolos a un estado de inercia. Los chichos, las estrías, los senos, la carne, la piel, la desnudez, le hacen frente a esas ideas de dominación, saliéndose de las estructuras de lo “políticamente correcto” y mostrándonos como realmente somos y como realmente queremos ser. El performance en cierta medida rescató la idea de lo erótico de la académica afroamericana Audre Lorde, en donde argumenta que lo erótico: 


Para perpetuarse, toda opresión debe corromper o distorsionar las fuentes de poder inherentes a la cultura de los oprimidos de las que puede surgir energía para el cambio”. 


Cuando parecía que nada más me iba a conmover, pues tenía las emociones a flor de piel, la breve aparición de Awilda Sterling Duprey –sí, de la mujer que a pesar de tener 78 años de edad todavía puede presumir de una vitalidad impresionante– generó una ovación que sentenció una vez más el por qué de la magnificencia de su imagen y legado. Varios “¡Oye!” que salían de su boca con la jocosidad característica de la cultura afrodescendiente como forma de resistencia y que nos abraza, retumbó toda la sala, y un caminar lento lleno de gestos y movimientos que aunque no se veía físicamente, rompieron barreras y liberaron. 


por Laren M. Calderón Franco
por Laren M. Calderón Franco

¿Qué nos queda más que el cuerpo para resistir, comunicarnos, y liberarnos? El cuerpo es un lenguaje vivo que habla y se manifiesta en respuesta a los tiempos en los que vivimos. Es un documento que preserva historias y experiencias que narran y que guardan legados ancestrales que nos guían hacia mejores porvenires. Trazos es un espacio inmersivo donde reflexionar y cuestionarse es vital para imaginar la infinidad de otros mundos y posibilidades que habitan tanto dentro como fuera de nosotros. Desde la poética del cuerpo, se pueden pensar y repensar futuros más prósperos, llenos de mucho sandungueo y corporalidad desafiante frente a un monstruo que amenaza con devorarnos constantemente. El legado de Awilda Sterling Duprey, hoy día, está más vivo que nunca. 


 
 
 

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